Estos científicos descubrieron en sus estudios con animales que un consumo moderado de cobre durante el embarazo es imprescindible para el desarrollo del feto y la evolución del niño en los primeros meses de vida.
Durante los últimos meses de la gestación es altamente recomendable una dieta que incluya cobre. Cuando decimos cobre nos estamos refiriendo al mismo cobre que todos conocemos, el que se utiliza en las cañerías y en los cableados telefónicos. Y es que éste es un oligoelemento esencial que hace presencia en todos los tejidos del cuerpo.
Éste lo podemos encontrar en los granos completos, legumbres, pasas y chocolates.
Resulta clave para dar fortaleza a la madre y al hijo. El feto captara el cobre al absorberlo de la placenta, lo cual le permitirá mantener altos registros de crecimiento y desarrollo. Esta nutrición es recomendable para los últimos 3 meses de embarazo, de esa manera el niño almacena el cobre necesario para sus primeros meses de vida que es cuando su ingesta dietética es baja. A la madre la ayudará a evitar anemia y transportar hierro a los tejidos.
Fuentes de cobre en la dieta durante el embarazo
Los nutricionistas recalcan que la ingesta diaria ideal es de 2 mg. al día. Por ejemplo, el polvo de cacao tiene 36 mg de cobre por cada kilo.
Ostras y otros mariscos, granos enteros, legumbres, nueces, papas, vísceras (riñones, hígado), verduras de hoja oscura, frutas deshidratadas, cacao, pimienta negra y la levadura.
La falta de cobre puede traer aparejado consigo anemia y osteoporosis. Pero su ingesta debe ser controlada porque en grandes cantidades resulta tóxico.
Consumos recomendados de cobre durante el embarazo
Bebés
• 0 a 6 meses: 200 microgramos al día (mcg/día)
• 7-12 meses: 220 mcg/día
Niños
• 1 – 3 años: 340 mcg/día
• 4 – 8 años: 440 mcg/día
• 9 – 13 años: 700 mcg/día
Adolescentes y adultos
• 14 – 18 años: 890 mcg/día
• 19 años en adelante: 900 mcg/día
Mujeres embarazadas y lactantes
• Durante el embarazo: 1000 mcg/día
• Período de lactancia: 1300 mcg/día
(Consulte a su médico)